En la plaza de la Vila, porticada de forma irregular pero proporcionada, fue donde se bailó la sardana actual por primera vez. A poniente, en la casa número 6, destaca un ventanal gótico-renacentista. A levante se encuentra la capilla de Sant Antoni, del siglo XIII y con fachada del siglo XVIII, actualmente convertida en sala de exposiciones.
El edificio del Ayuntamiento data de los siglos XV-XVI. Al norte, un magnffioo reloj de sol preside una de las casas de la plaza; a su lado se observa un balcón renacentista.
Detrás de la plaza de la Vila se encuentra la plaza del Compositor Pere Rigau. En esta plaza, conocida en otro tiempo como plaza de Les Mesures, encontramos un monumento contemporáneo que representa las fases de la luna, obra del artista Francesc Ruestes.