Siguiendo por la calle de Ullà, una de las calles comerciales importantes del municipio, a mano derecha encontramos la calle de Sant Agustí. Su nombre viene del antiguo convento de los agustinos, fundado en el siglo XV, y que perduró hasta finales del XIX.
En él destaca el claustro de estilo renacentista del siglo XVll, uno de los mejor conservados de Cataluña. Desde el claustro nos acerraremos a la plaza de la Vila paseando por las calles comerciales de Sant Agustí y Porta Nova.