La iglesia de Sant Genís, como otras de l’Empordà, está inacabada, y por ello presenta un campanario muy singular, sin cubierta.
La primera mención de una iglesia en Torroella de Montgrí es del año 1209, aunque seguramente ya existia con anterioridad un templo románico en la villa. El mal estado del edificio, que amenaza ruina, hace que a inicios dels siglo XIV se decida construir un nuevo templo de dimensiones catedralicias. La construcción, de un gótico catalán sobrio y austero pero grandioso y atrevido en dimensiones, se alarga más de cuatrocientos años y no es hasta el 3 de mayo de 1609 que se consagra el nuevo templo. Las guerras, pestes y dificultades económicas aplazan la construcción de la fachada principal hasta los siglos XVIII y XIX.